domingo, mayo 18, 2008

Del género, la política y otras yerbas socialistas

Durante el mes de abril, entre la confección de carteles, las manifestaciones fuera del Tribunal Constitucional, la píldora y las elecciones internas, entre toda esa bataola de información un correo electrónico cayó de improviso en mi casilla, y como su título no habla del Peta Fernandez, de la firmita o del vote por mi, pasó casi inadvertido.

Días después, limpiando la misma casilla, volvió a aparecer y más con la obsesión cuasi voyersia de saber todo de todo, lo abrí y de inmediato captó mi atención, a medida que pasaba la vista por este me iba contando como el PSOE y el Gobierno de Zapatero, apostaba en el recién creado Ministerio de la Igualdad por un rostro joven, su nombre Bibiana Aido, mujer profesional, socialista y menor de 35 años.

Siempre me ha llamado la atención la capacidad del PSOE de captar las necesidades de la población y sobre todo los cambios societales que se han dado en la ciudadanía española, no es baladí de que sean ellos quienes lleven la batuta en cuanto a gobierno socialdemócrata y la institucionalización a nivel del Estado de conceptos como transverzalización de género, igualdad de oportunidades. Debo reconocer que cuando me enteré de que las y los españoles socialistas entendían la violencia contra la mujer como una problemática de género y no como una situación cuasi anecdótica que sucede en forma intrafamiliar, suspiré y no fue un de esos suspiros leves, impreceptibles, sino que fue de esos profundos, largos y que repercuten el alma y el cuerpo, que te obligan además a pensar después…y claro, pensé….por que ellos-as y no nosotros-as…la respuesta no puede ser sólo geográfica, es decir, bien fácil sería pensar que se debe a que ellos-as viven en Europa y nosotros-as en América Latina…

No me queda muy claro como es posible que ambos partidos, perteneciendo a la misma vertiente ideológica sean diferentes cuando nos sentamos a hablar de los derechos de las mujeres; ellos-as hablan de paridad, nosotros-as ni siquiera respetamos un 30% de acción positiva de género en a inscripción de lista (y todas sabemos cuanto nos cuesta cada vez que hay elecciones).

Impresionante que ellos-as hablen de aborto, como un derecho humano y político de las mujeres, y nosotros-as, luego del último congreso, siendo que este derecho fue aprobado en plenaria para ser incorporado en las resoluciones, tengamos a nuestro representantes diciendo en televisión y foros públicos, que no tiene claro si fue votado o no, o que el Senador Letelier llegó atrasado a la votación plenaria y no alcanzó a entregar el voto político (situación que raya en el realismo mágico cuando una plenaria entera levantó su credencial esa noche para decir que estaban de acuerdo con el derecho de las mujeres a sobrevivir en el caso de un embarazo que ponga en riesgo sus vidas).

Tratando de encontrar algo que nos dejara mejor parados-as en esta comparación sin sacar a colación el hecho de tener a una Mujer en la más alta Magistratura, ya que todos-as sabemos que de no ser por la presión de la ciudadanía la Presidenta Bachellet nunca hubiera pasado el cerco B/Varonil, comencé a navegar por la web del PSOE, y me fui derechito su Secretaria de Igualdad (par de nuestra Vicepresidencia de la Mujer) y para mi sorpresa me encontré que estaba a cargo nada menos de Maribel Montaño. Para quienes no conozcan a Maribel, ella ha sido históricamente parte del grupo que ha propiciado la alianza política entre mujeres militantes del PSOE y aquellas que generan su acción política en la sociedad civil, teniendo el especial cuidado de mantener los espacio de formación y contar con la colaboración de Amelia Varcarcel, Dolores Renau, Rosa Peris, Inés Alberdi, Montserrat Boix, etc. Todas mujeres políticas feministas que trabajan en alianza la Secretaria de la Igualdad tanto en la producción y apoyo a las diputadas del PSOE como en la formación y preparación política de las militantes.

Cerré la página web, el correo electrónico, los blogs varios, y me puse a pensar que la gran diferencia, lo que en realidad nos separa entre PSOE y PS en cuanto a la perspectiva de trabajo con las mujeres militantes como sujetas políticas, es que ellos-as, si la tienen. Y la han mantenido en el tiempo, a pesar de los acuerdos y equilibrios que han tenido que generar en términos internos, han priorizado por instalar en su Secretaria de la Igualdad ha mujeres con reconocido trabajo político de género, y por lo mismo han podido mantener en el tiempo, insisto a pesar de las diferentes sensibilidad o corrientes internas a las que pertenezcan estas mujeres, proyectos de formación y alianzas que hoy dan los frutos que dan, que nos muestra a un Partido Moderno, inclusivo y con equidad de género.

Que ganas de tener un PS así, que deseos de que la Vicepresidencia vuelva ser un espacio con poder y proyecto político, como en los tiempo de Vivian Bachellet, Fanny Pollarollo u otras que de seguro se me van de la memoria y a las militantes que históricamente han hecho su aporte, que congregue a hombres y mujeres que creemos en la equidad de género, que se mantenga más allá de las incursiones de algunas, que aún nos negamos a que está sea una mera moneda de pago.